Las marcas europeas están tratando de defender su mercado ante las invasiones de las marcas procedentes de Asia. Para eso están poniendo en valor no solo la gran calidad de sus productos, sino también sus servicios post venta. Encontrar un servicio técnico Bosch, por ejemplo, es mucho más sencillo que encontrar un servicio especializado en estas marcas de Asia, especialmente en las más baratas.
Aunque muchas marcas asiáticas tienen ya sucursales en Europa, son solo las más grandes y fuertes las que cuentan con fábricas en este continente. Por eso, otra baja a favor de los electrodomésticos europeos es el poder contar con recambios originales de las máquinas de forma rápida y sin complicaciones.
Electrodomésticos de bajo coste
Los electrodomésticos de bajo coste llevan años en el mercado. Muchos establecimientos se han especializado en marcas blancas que son en realidad una línea económica de otras marcas más conocidas. En este terreno son especialistas los asiáticos, que además de controlar grandes marcas propias se han dedicado a expandirse adquiriendo marcas europeas que ahora están bajo su control y también muchas marcas blancas.
Las marcas europeas han entendido que es importante jugar también en este terreno y por eso ya son varias las que han sacado segundas marcas con productos que ofrecen buenas prestaciones pero que recortan en la calidad de sus materiales externos o en sus diseños, consiguiendo un producto low cost pero con resultados bastante buenos.
Para quienes no sea imprescindible un electrodoméstico de alta gama con todas las prestaciones y las líneas más actuales, estas segundas marcas son una excelente manera de tener calidad a un precio mucho más competitivo.
Por supuesto, estas segundas marcas cuentan con servicios especializados y con recambios de la misma manera que la marca principal, por lo que no hay ningún problema en este sentido si se escoge comprarla.
China entre en el mercado
Hasta ahora eran países como Corea o Japón los que introducían sus productos de manera habitual en estos mercados, pero China está comenzando a entrar con fuerza en el mercado Europeo gracias a los incentivos del gobierno de esta nación que ayuda a que sus empresas puedan competir en otros continentes.
La calidad y el mejor servicio post venta son las bazas de los productos europeos, que cuentan con la confianza de muchos consumidores que llevan años disfrutando de sus excelentes prestaciones.