¿Qué es exactamente un robot?

En términos generales, un robot posee la capacidad de interpretar su entorno y adecuar sus acciones a la consecución de un objetivo. Los primeros robots de la era moderna fueron inventados para acelerar los procesos de fabricación industrial mediante la automatización programada.  No obstante, a día de hoy los robots se han convertido en sistemas completamente autónomos capaces de funcionar y tomar “decisiones” sin la intervención del ser humano.

Hacia 1970, la fabricación mediante robots era una práctica extendida en la industria automovilística en los Estados Unidos y el Japón. A finales de 1980, el Japón era ya el líder mundial en la fabricación y uso de robots industriales.

Desde la década de los 80, momento en que se generalizó el uso de robots industriales en la automoción y en otras líneas de producción industrial en los Estados Unidos y el Japón, los componentes mecánicos robotizados han ido evolucionando y son cada vez más sofisticados y autónomos.

El uso de nuevos materiales y los avances punteros en inteligencia artificial como el brazo robótico, mecatrónica, navegación, tecnología de sensores, reconocimiento de objetos y procesamiento de información, han transformado la robótica en un ámbito multidisciplinar.

Los robots se basan cada vez más en el uso de datos y están conectados a redes inteligentes, como aquellas que se están desarrollando para su uso en drones y vehículos autónomos.

La incidencia de los robots

Los robots ya están teniendo una incidencia significativa en los procesos de fabricación de los sectores del automóvil y la electrónica.  También se usan cada vez más en agricultura, minería, transporte, exploración espacial y marítima, sistemas de vigilancia no tripulada, salud, educación y muchos otros campos.

Los robots pueden aumentar la productividad laboral, reducir los costos de producción y mejorar la calidad del producto.  Además, en el sector servicios han generado incluso modelos operativos completamente nuevos.  Los robots también contribuyen al bienestar humano eliminando la necesidad de realizar trabajos pesados y peligrosos, ayudando a una población envejecida y convirtiendo en realidad el transporte sostenible.

El mercado de los robots industriales, incluyendo el coste de programas informáticos, periféricos e ingeniería de sistemas, crecerá hasta alcanzar aproximadamente los 33.000 millones de dólares de los EE.UU. en 2017.

Asia (concretamente China, la República de Corea y el Japón) es líder mundial en ventas en el sector de la robótica, seguida de Europa y América del Norte.

Los beneficios económicos obtenidos del uso de robots están directamente relacionados con la sustitución parcial de la fuerza de trabajo.  Si bien las mejoras de productividad generadas por los robots ayudan a las empresas a seguir siendo competitivas y a crear puestos de trabajo con salarios más elevados en determinados países, la repercusión general de los robots en el empleo sigue siendo incierta y resulta un desafío cuantificar los beneficios económicos de su uso.